Esta última versión, llamada NetGauge, se convierte en una nueva plataforma de tests de velocidad de última generación. En los últimos dos años, Ookla, la empresa norteamericana desarrolladora del software y un referente para la mayoría de tests de velocidad alrededor del mundo, ha estado trabajando para actualizarlo.
Hasta ahora, los tests de velocidad estaban más orientados a conexiones domésticas de baja capacidad, con un máximo de 100 Mbps. Las redes han ido evolucionando derivando en conexiones de fibra óptica, LAN de alta velocidad inalámbrica, como Wimax, 3G y 4G. Por este motivo, Ookla ha desarrollado NetGauge, un nuevo motor de pruebas evolucionado para poder medir conexiones de alta velocidad. De hecho, la Anella Científica dispone desde el 2010 del test de velocidad y diagnosis NDT que comprueba conexiones de hasta 1 Gbps, proporcionando pruebas de rendimiento y de configuración de la red en las instituciones conectadas a la Anella Científica.
NetGauge utiliza el protocolo de transporte TCP en lugar del protocolo de aplicación HTTP, que usaba la versión anterior. Esta característica favorece un control más acurado de las medidas obtenidas y permite realizar tests con servidores proxy en la red, que eran dificultosos de realizar con el protocolo HTTP. Además, NetGauge no depende de un componente pasivo a través de un servidor web, sino que utiliza un demonio (daemon) que se instala de forma independiente en el servidor que recibe las conexiones de los clientes y participa en el proceso de prueba.
Una de las ventajas que ofrece el test de velocidad a los miembros del CATNIX respecto a otras similares es su independencia del operador que provee la conexión a internet. Otra es su ubicación en el punto neutro, que proporciona una mínima latencia. Además, dispone de un interfaz amigable y rápida.